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lunes, 31 de diciembre de 2007

NAVIDAD EN EL MUNDO

¿Qué es la navidad sin su buena decoración? Nada. Sueno rotunda, lo sé. Pero para las personas a las que nos gusta la navidad y lo que ella implica es imposible pensar en estas fiestas sin un Belén o un árbol.

Las ciudades se muestran acogedoras y festivas con grandes luces dando la bienvenida al nuevo año. La gente intenta ser más generosa estos días, craso error, porque creo recordar que el año tiene 365 días y no 12 pero me consuela pensar que menos sería nada. Tan generosos son algunos que incluso tienen el detalle de sacar a la calle altavoces donde nos regalan sesiones non-stop de villancicos. "El Tamborilero", "Pero mira como beben" o "A Belén pastores" son esos hits que nunca pasan de moda. Personalmente nada como "So this is X-mas" de John Lennnon pero dejando al margen culturas sajonas nos quedamos con los nuestros, los de toda la vida.


Escuchar los villancicos me recuerda a la tarde del sábado previo a Nochebuena con madre poniendo el Belén y el árbol de navidad con los villancicos sonando a todo volumen ¡qué recuerdos! Ahora que ya tengo una edad solo consigo escucharlos en la calle o en el concierto que cada Nochebuena Televisión Española nos regala con Raphael, ese incansable Tamborilero que no nos deja pasar la noche en paz por mucho que todos villancicos así la denominen.

Esta Navidad 2007 será recordada como aquella Navidad donde estalló la guerra entre Papa Noel y los Reyes. Un sector de la sociedad ha decidido protestar contra los tan de moda Papá Noel que cuelgan de muchos balcones españoles y por ello han decidido decorar sus fachadas con una imagen del niño Jesús más propia de la Semana Santa. Que situación, incluso ¡qué privación! Montones de niños Jesús en los balcones de mi ciudad y yo que desconocía la guerra me quedo ahí pensando que me he perdido alguna celebración o que me he equivocado de fiestas. Parece que vivimos en un mundo donde la protesta es esencial y hay que hacerla a cualquier precio, incluso poniendo a parir a Papá Noel que ni siquiera existe. ¿Estamos bien de la cabeza?
Saltando las polémicas y volviendo a la metamorfosis navideña, hago un recorrido por los abetos navideños europeos en internet y me quedo con este, en Roma, mientras pienso ¿qué opinarán en los otros países de que en España para hacer la guerra a Papá Noel colguemos imágenes del niño Jesús en la ventana? ¿Por qué esto me recuerda a los pueblos donde ponen botellas de agua en las ventanas para espantar a los gatos o cd's para las moscas? ¿Qué tipo de guerra psicológica es esta?

3 comentarios:

Diego M.O. dijo...

¿No existe Papá Noel? Buaaaaaah

medejasprivada dijo...

Como le diria Baltasar a Anan en la intimidad: de noir a noir, no existe Papá Noel.

mom dijo...

que viva Baltasar!